La yurta es una tienda de campaña de madera y lonas de lana que utilizan los nómadas de la Asia Central desde la Edad Media.
Está protegida por una gruesa cubierta de lana y es óptima para soportar cambios climáticos rigurosos. Su forma es circular, con un pequeño agujero en la parte superior que permite la entrada de luz natural y la salida de humos. Además también tiene la función de soportar los extremos de las vigas de madera dispuestas en forma radial.
El espacio es amplio y confortable, fresco en verano y cálido en invierno. La optimización de la temperatura de la yurta se consigue aumentando o disminuyendo el número de cubiertas que la recubren en función de la época del año.
La yurta puede tener diferentes tamaños. En nuestro caso, la yurta disponible permite alojar hasta 6 personas, habiendo espacio suficiente para dormir, relajarse en el sofá o comer alrededor de la mesa. Para las épocas de calor, hemos dispuesto una cocina y comedor exteriores, en plena naturaleza y con fantásticas vistas al Moianès.
Espacio disponible para "calçotades" y barbacoas.